“EL AUTISMO NO ES UNA ENFERMEDAD, ES UN MODO DIFERENTE DE SER HUMANO. LOS MENORES CON TEA NO ESTÁN ENFERMOS, NO HAY QUE “CAMBIARLES”, SINO ENTENDERLES”, AFIRMA FRANCISCO GARCÍA GONZÁLEZ, PSICÓLOGO EXPERTO EN TEA, TRASTORNO DEL ESPECTRO AUTISTA.
2 DE ABRIL, DÍA MUNDIAL DE CONCIENCIACIÓN SOBRE EL AUTISMO
ENTREVISTA A FRANCISCO GARCÍA GONZÁLEZ, PSICÓLOGO EXPERTO EN TEA DE LA ASOCIACIÓN AUTISMO HUELVA ÁNSARES Y MIEMBRO DEL COLEGIO OFICIAL DE PSICOLOGÍA DE ANDALUCÍA OCCIDENTAL
- En el día Mundial de la Concienciación sobre el Autismo ¿Se han roto las barreras por la sociedad sobre esta discapacidad del desarrollo que a veces provoca estigmatización y discriminación?
En nuestra sociedad todavía quedan muchas barreras que romper, aún queda mucho por hacer y sensibilizar, tantos prejuicios que eliminar, para que estas personas con TEA puedan disfrutar plenamente de sus derechos, aunque poco a poco y gracias al trabajo diario vamos viendo pequeños resultados, que hacen llenarnos de esperanza.
Desde las asociaciones tenemos un papel importante, por eso solicitamos el desarrollo efectivo de medidas que promuevan la accesibilidad universal de la información, de los entornos, bienes y servicios, garantizando su adecuación para las personas con Trastorno del Espectro del Autismo.
- ¿Desde su Asociación en Huelva como se ayuda a estas personas y sobre todo cómo se ayuda a los familiares y amigos?
Pues como una asociación que va creciendo, tenemos una misión, una visión y unos valores fundamentales. Nuestra misión principal es acompañar desde nuestro compromiso ético a las personas con TEA y Trastorno del desarrollo y sus familias para que puedan lograr su inclusión social como ciudadano de pleno derecho, ofreciendo para ellos servicios y apoyos que cubran sus expectativas y en ocasiones la superen.
La visión es ser referentes en la provincia de Huelva en la atención a las personas con TEA y “con trastornos en el desarrollo” y sus FAMILIAS.
Y unos valores que nos hace importantes que son bienestar, escucha, desarrollo profesional y abierto constantemente al aprendizaje.
El autismo no es una enfermedad, es un modo diferente de ser humano. Los menores con TEA no están enfermos, no tenemos que “cambiarles” ni “arreglarles”, sino tratar de entenderles y cambiar lo que nosotros hacemos. En otras palabras, la mejor manera de ayudar a una persona con TEA es cambiar nosotros mismos (nuestras actitudes, comportamiento y tipos de apoyo que proporcionamos).
Nuestras intervenciones se centran en la persona con TEA y en las familias, haciendo hincapié en sus necesidades, concretas e individuales, tomando como referencia sus puntos fuertes, sus habilidades y preferencias, y también sus debilidades y dificultades.
Desde nuestro centro ofrecemos numerosos servicios para cubrir las necesidades que la familia presenta. Tenemos servicio de Atención Temprana, en edades de 0 a 6 años. Servicio de Unidad Terapéutica, de 6 años en adelante y el Servicio de Centro de día, para las personas con TEA mayores de 16 años.
También ofertamos múltiples actividades de ocio y respiro. Estimulación rítmica, Multideporte, Hidroterapia (piscina), arteterapia y taller de juegos. Los fines de semanas alternos también hacemos salidas inclusivas a entornos sociales, y salidas de respiro familiar.
- Usted es psicólogo de la Asociación Autismo Huelva ÁNSARES. El autismo se detecta en los 3 primeros años del niño, persiste hasta la adolescencia y a veces a edades adultas ¿Cuáles son los signos a los que se debe estar atentos en la infancia?
El TEA, se hace visible en la mayoría de los casos sobre los 18-24 meses de edad, por eso se suele hablar de trastorno infantil, porque se detecta en edades infantiles. Es un trastorno que no tiene cura, quiere decir que la persona que nace con TEA, fallece con TEA. Por supuesto que se producen mejoras, evoluciones que a veces hace pensar que ha desaparecido sus dificultades, aprendizajes sobre situaciones que repiten con buenos resultados, aunque hay dificultades que permanecen de por vida.
Los síntomas más destacables son la falta de interacción social, muestran dificultad para relacionarse con otros niños de la misma edad, poco o nulo contacto visual, evitan el contacto físico, no responden al ser llamados por su nombre, no tienen lenguaje y si lo tienen presenta alteraciones. También aparecen las estereotipias (movimientos repetitivos), poca tolerancia a la frustración, risas o llantos sin motivo aparente, presentan hiperactividad o son muy pasivos, no hay juego simbólico, carecen de juego creativo, pueden presentar déficits sensoriales, puede tener una gran tolerancia al dolor.
Hay que hacer una mención especial para desmitificar el asunto de que la vacunación es culpable de la aparición de los TEA.
Después del desarrollo de numerosos trabajos de investigación a gran escala y a nivel internacional, actualmente la comunidad médica y científica de todo el mundo apoya de forma unánime la conclusión de que no existe evidencia que relacione la vacunación y el desarrollo de los TEA.
- Si se trata desde niño, por los estudios y casos ¿Cómo evoluciona este trastorno? ¿llega a desaparecer?
El TEA es un trastorno muy amplio. Con la misma etiqueta podemos identificar a dos personas completamente diferentes, personas que no tienen lenguaje y ninguna intención de comunicarse, a otras personas con un lenguaje y un nivel cognitivo muy desarrollado y con pequeñas carencias sociales. La evolución de los casos suele ir relacionados con el nivel de desarrollo que cada persona tenga y el nivel de afectación del trastorno. Pero en casi la totalidad de los casos siempre se producen evoluciones, ya sean a medio o largo plazo.
El TEA es un trastorno que perdura a lo largo de todo el ciclo vital.
- Factores ambientales y genéticos, la tasa de incidencia es de 1 cada 160 niños. ¿Ha aumentado en los últimos años o es que se detectan y se reconocen más los casos de TEA (Trastorno del Espectro Autista)?
En los últimos años se ha constatado un aumento considerable de los casos detectados y diagnosticados. Es posible que este incremento se deba a una mayor precisión de los procedimientos e instrumentos de diagnóstico, a la mejora en el conocimiento y la formación de los profesionales, o ciertamente, a un aumento real de la incidencia de este tipo de trastornos.
Por ello, manejamos las cifras de estudios epidemiológicos realizados en Europa, que apuntan una prevalencia de aproximadamente 1 caso de TEA por cada 100 nacimientos (Autism-Europe aisbl 2015)
- Sin intervención de un profesional de la psicología especializado el trastorno avanza ¿Hasta dónde mejora o se minimiza el tratamiento psicológico?
Como en todas las parcelas de la vida, la psicología juega un papel fundamental. Hacen falta psicólogos especializados en el diagnóstico, para poder identificar el trastorno lo más temprano posible, ya que se ha demostrado que una atención temprana consigue que los pequeños obtengan mayor evolución. Hay que saber comunicar los diagnósticos y trabajar posteriormente las posibles alteraciones emocionales en los familiares.
Hacen faltan psicólogos especializados para poder llevar a cabo programas de intervención adecuados para las personas con TEA.
Hay que estar dispuesto al aprendizaje continuo, ya que periódicamente se van produciendo avances en tratamientos y hay que formarse, para poder ofrecer los mejores servicios a las personas con TEA y sus familias.
- ¿Cuáles son los últimos avances?
Las últimas investigaciones conocidas van acercándose cada vez más a los genes implicados en el TEA. Lo que en unos años podríamos conocer exactamente la causa, y dónde se produce, para una posible intervención directa sobre los aspectos nucleares del trastorno.